Hoy juró en el Capitolio el nuevo congresista republicano David Jolly, quien ganara , para sorpresa de todos, las elecciones especiales llevadas a cabo este pasado martes en el distrito 13 del estado de Florida.
¿Por qué resulta esta victoria, que en otras circunstancias sería intrascendente, tan importante para los republicanos ? Simplemente porque les ratifica las grandes posibilidades de mantener la mayoría en la cámara de representantes, y hasta les permite soñar con recuperar el Senado en las próximas elecciones a celebrarse en noviembre.
Jolly, siendo un lobbista en Washington DC desde el año 2007 y sin demasiadas credenciales políticas, resultaba un candidato débil, con pocas posibilidades de triunfar. Competía a su vez, ni más ni menos que contra la renombrada demócrata Alex Sink, de gran trayectoria política y abultados fondos en sus arcas para enfrentar su campaña con éxito, en un distrito que, adicionalmente, había votado a Obama en las últimas dos elecciones presidenciales. Pero el milagro sucedió y los republicanos festejan, aunque con cautela y tomando nota de la estrategia.
¿ Cuál fue la clave de su victoria? Un mensaje centrado en atacar el Obamacare y su fallida implementación que cada día cuenta con menos simpatizantes , sobretodo entre la población mayor de 65 años , que representa el 30% de este distrito.
El cargo quedó vacante el año anterior con la repentina muerte del republicano C.W. Bill Young. Este distrito poco a poco había ido virando para las aguas demócratas. Obama gano allí las elecciones del 2008 con el 52% de los votos, obteniendo cuatro años más tarde una ajustada victoria con el 50%.
Alex Sink llevaba todas las de ganar. Había sido candidata por su partido a la gobernación del estado de Florida en las elecciones del 2010. Perdió por sólo 61.550 votos de un total de 5.3 millones, contra el multimillonario empresario republicano Rick Scott, quien invirtiera en su campaña y de su propio bolsillo, la fabulosa suma de 73 millones de dólares . Sin embargo, en esas mismas elecciones, Sink ganó en este distrito por 2 puntos de diferencia.
La victoria de Jolly deja en evidencia el descontento existente entre el electorado con respecto al Obamacare, entre otras cosas, que han hecho caer la popularidad del presidente estadounidense a la magra cifra del 41% en las últimas encuestas.
Los republicanos toman nota de esta exitosa campaña y se preparan para lanzarse a recuperar la mayoría en el senado cuyas posibilidades parecieran ser hoy del 50/50. Saben que este resultado no sólo les facilitará sino fortalecerá la recaudación de fondos para las próximas elecciones. Sólo necesitan recuperar 6 bancas del Senado y mantener las actuales para pasar a complicarle aún más los últimos años de gestión al presidente Obama. Algunos de los posibles estados ha recuperar en noviembre según Grover Norquist, influyente conservador, presidente del grupo Americans for Tax Reform (estadounidenses por una reforma fiscal) serían: West Virginia , Dakota del Sur, Carolina del Norte , Luisiana, Montana, Arkansas y Alaska.
Por su parte, los demócratas se consolarán diciendo que difícilmente se puede ganar una banca que pertenezca al partido opositor en una elección especial. Pero lo que sí deberán hacer definitivamente es una auto crítica ya que, teniendo todo a su favor, perdieron la elección. Esto si es que desean mantener la supremacía en el Senado y avanzar sobre la Cámara de Representantes.
En política nunca está todo dicho y en ocho meses pueden cambiar muchas variables. Todavía queda un largo camino con mucho por hacer para cautivar a un electorado ya cansado de las disputas entre ambos partidos y dispuesto a castigar a quien cometa errores y falte a sus promesas.