Por: Tomás Bulat
Sorpresivamente el gobierno nacional presentó un proyecto para modificar el mercado de capitales.
Es sorpresivo porque el mercado de capitales no genera ningún problema y de hecho no conozco ningún sector económico, sea ahorrista o empresario, que estuviera pidiendo hacer modificaciones, entre otras cosas porque el principal problema del mercado es que es muy chico y mas luego de las eliminación de las AFJP.
La pregunta es ¿Que busca el gobierno con esta reforma?
Si es proteger el ahorro de los argentinos, claramente no es el lugar prioritario, ya que son pocos los fondos que allí se encuentran. Tampoco se entendería la necesidad ya que si hubo una institución que cumplió con sus contratos en la crisis 2001/2002 fue la bolsa de comercio y su mecanismo de autorregulación.
Es decir que en la crisis lo regulado por el estado no cumplió y lo autorregulado si.
El otro problema podría ser fomentar el financiamiento de empresas a través de este mercado.
Hay dos formas de hacerlo, vía emisión de acciones o emisión de deuda.
En estas dos la información es fundamental, porque lo que hay que cuidar es al inversor, es decir al que pone la plata y por lo tanto transparencia y calificación son imprescindibles.
Pero hay un factor adicional y mas importante y es que los contratos se vayan a cumplir sin interferencias que modifiquen su esencia. Y en este último punto es donde la reforma pone mas dudas por el poder que le da a la CNV
Lo cierto es que la cantidad de empresas que están en el panel accionista ha ido disminuyendo porque cada empresa nacional que es comprada por una extranjera trata de retirarla de la bolsa.
El otro problema son las obligaciones negociables es decir los préstamos. Lo paradójico es que muchas de estas están en dólares, porque en esa moneda se pagaba una menor tasa de interés pero principalmente se extendían los plazos. Por lo tanto esta ola pesificadora a la fuerza que promueve el gobierno es un temor ya que romperían los contratos al no permitir que las empresas puedan adquirir los dólares para cumplir con sus inversores.
NO hay Pymes.
También se dice que la bolsa no financia a la Pyme. Esa es otra gran falacia, ya que si bien es cierto que no hay muchas emisiones de acciones, ni de obligaciones negociables, la Bolsa de Comercio hace tiempo tiene un área especial para avanzar en esto y conducido por personas de larga tradición en la Pymes y de hecho han realizado bastantes acciones en conjunto con la Secretaria Pyme.
Pero no puedo dejar de nombrar el desarrollo de fideicomisos para descuento de cheque de Pymes que ha logrado bajar sensiblemente el costo de esa financiación. Tan es así que dicho mecanismo lo utilizan más de 1.000 pequeñas empresas.
Regular: ¿el mercado o las empresas?
Entonces no queda claro en que aporta la reforma, ya que los inversores (ahorristas) no creen que este gobierne haga mucho por defender sus ahorros. Lo cierto es que ahora la CNV tendrá poder de sancionar a empresas y a operadores en caso considere que hay manejos poco transparentes de las operaciones. No solo eso, sino que la reforma incluye un sutil cambio de fuero en caso de controversia y ahora es el Tribunal Contencioso Administrativo en lugar del Civil y Comercial.
Supongamos por caso que la acción de Techint tenga una suba abrupta un día, y luego baje rápidamente. Y esto haya sido por un rumor originado en la empresa y que llego al mercado. La CNV puede investigar el origen de este movimiento sospechoso con dos motivos. El primero ver si hubo algún ahorrista perjudicado con una información que no fue correcta o puede directamente ponerse a buscar y sancionar como prioritario a la empresa.
Entonces una CNV con mayor poder, que busca defender al inversor, puede ser algo bueno, pero si usa ese poder para disciplinar y sancionar a las empresas que cotizan en bolsa y que no están en gracia con el gobierno, es otra.
Es obvio que no es ajeno a lo que paso en su momento con la intervención de Papel Prensa que el gobierno quiera modificar el mercado de capitales. Cuando acusaron a Papel Prensa de no presentar los balances, la Bolsa informo de todo lo actuado y como estaba acorde a procedimiento, la justicia civil confirmo que estaba todo en regla.
En la reforma esas dos instancias se cambian. Ya no es la bolsa, es la CNV y ya no es el Tribunal Civil y Comercial, sino el Contencioso Administrativo.
Ahorro y control
Es claro que el gobierno en varias empresas ya tiene acciones por medio del ANSES y ahora le faltaba modificar las reglas para definitivamente sancionarlas y controlarlas.
No se puede analizar una ley fuera del contexto del gobierno que la presenta. Este proyecto, y siendo absolutamente coherente con lo que viene haciendo en otras áreas de gobierno, no es para defender y promover el ahorro. Es para tener otro instrumento más para que el Estado avance sobre las empresas privadas. Y en eso no hay sorpresas.
Nuevamente muestra que las empresas que decidieron abrir su capital se equivocaron en Argentina. Creían que vendían una parte minoritaria y terminan cediendo el control. Es difícil pensar que luego de este contexto alguna empresa piense en cotizar en bolsa.
Seguramente también un ahorrista o inversor lo pensara dos veces antes de colocar su dinero en un mercado que gano en controles y discrecionalidad.