En mi pago chico (la marina y los barcos) la noticia de la designación de un fiscal militar para llevar a juicio administrativo a marinos civiles, generó muchos más chascarrillos que críticas o apoyos. La ley en la que se basa el funcionamiento del “ Tribunal Administrativo de la Navegación” data de la dictadura autodenominada “ Revolución Argentina” y entre otras cosas faculta al presidente del tribunal ( a la sazón un almirante) a ordenar la detención de un “imputado que se niegue a comparecer”. ¿Se imagina, amigo lector, el picnic que se haría hoy un estudiante de primer año de derecho con una orden detención librada por un almirante? Demás está decir que este tribunal no funcionaen la práctica desde hace muchísimos años, pues su esencia misma ha sido demolida más que por el paso del tiempo por el sentido común. No es políticamente correcto ver a uniformados juzgando a alguien, ni siquiera a otros uniformados. De hecho la abolición del código de justicia militar, dejó en claro que los militares no pueden juzgarse a sí mismos. Mucho menos lo podrán hacer entonces con ciudadanos civiles que eligieron el mar como medio de vida. No obstante, algún alto mando naval está intentando hacerlo funcionar.
Extendiendo la mirada por fuera de los límites de mi pequeña comarca, la gran ciudad de la política nacional le gana una vez más a los grandes maestros de la ficción. Marcelo Tinelli suena con la misma intensidad en las usinas mediáticas como candidato a Gobernador de la principal provincia argentina y/o como Presidente de la Asociación del Fútbol Argentino. De nuevo use la imaginación querido amigo; visualice a Marcelo en su despacho poli funcional, revisando alternadamente expedientes relacionados con los grandes desafíos a encarar en la provincia; cuestiones inherentes al próximo torneo nacional de fútbol y el contrato final con la vedetonga de moda para su participación en el Bailando; en especial la cláusula que lo autoriza a cortarle la pollera al finalizar su actuación.
Hágase además un tiempo para recordar que por estos días se decidía -y se complicaba- la suerte del candidato a integrar la Corte Suprema de Justicia; un joven que con 33 años tiene una “vasta” experiencia en materia judicial; si hasta incluso fue asesor legal del Colegio Público de Abogados antes de obtener su título. Aunque aparentemente al igual que en el caso “Reposo” tiene alguna dificultad a la hora de redactar su CV y los datos allí volcados no son del todo exactos.
Si de justicia hablamos; a tres meses de su muerte, un nuevo allanamiento tiene lugar en el domicilio del ex Fiscal Nisman. Uno más y van… De puro ignorante no más me atrevo a preguntar; luego de 90 días y cientos de personas metiendo mano en una escena de crimen, ¿quedará algo por descubrir? ¿Será ya costumbre ir de tanto en tanto a la casa del malogrado funcionario? ¿O estaremos en presencia de una perversa distracción farandulesca de funcionarios judiciales?
La inagotable creatividad nacional y popular va mucho más allá de nuestras fronteras; casi arruinamos en Panamá el histórico acercamiento USA/Cuba con un discurso presidencial que cautamente podría calificar como inadecuado. Para no decir ridículo; porque luego me llaman al orden.
Para terminar esta breve y modesta compilación de nuestra particular realidad; no podemos dejar de mencionar la situación vivida por el periodista Alfredo Leuco; quien respetuosamente elevó una mesurada crítica a la anuncia nueva audiencia papal a la Presidente (que se encuentra en campaña para algún cargo a determinar) recibiendo como respuesta un llamado directo del Sumo Pontífice. La frase “Hola Sr. Leuco le habla el padre Bergoglio; Papa Francisco” quedará en los anales del periodismo nacional. Y me temo que en los del Vaticano también.
Sé lo que está pensando querido amigo; la lista es más larga, muchísimo más: las PASO, ganancias de la 4° categoría, narcotráfico, inseguridad, cepo, etc. Etc. Pero esto es una columna no una enciclopedia en 20 tomos.
Así están las cosas por estas pampas cuando ya estamos francamente inmersos en el tan ansiado y esperado 2015,l año en el que nos tocará decidir entre todos si mantenemos el rumbo o si buscamos nuevos horizontes. Debería ser un tiempo de mentes frías y espíritus serenos. De fino análisis; con la mirada puesta más que en el bienestar o conveniencia personal, en el sublime y ulterior fin de lograr un país mejor.
Es fundamental para ello, estar conectados con algo más que nuestro entorno; debemos consumir, digerir y asimilar todo lo que se nos pone ante la vista. Todo se relaciona con todo y todo servirá para tomar decisiones y las decisiones de todas y todos signarán nuestro destino
Podríamos decir que ante tanto fárrago informativo producto del mero devenir de los acontecimientos, debemos ser capaces de separar la paja del trigo; pero por lo que se ve; puestos en esa saludable tarea intelectual, descubriremos con tristeza y preocupación que o hay demasiada paja o realmente nos hemos quedado sin trigo en el granero del futuro de la Patria.