Por: Pedro Robledo
Puedo recordar aquella tarde volviendo de mi último año de la secundaria cuando prendí la televisión y vi a Mauricio Macri junto a la entonces ministra de Desarrollo Social, Maria Eugenia Vidal inaugurar un centro de estimulación temprana. Fue ese momento en el que sentí que tenía que formar parte de un proyecto que estaba pensando a largo plazo, focalizando la política pública y atacando el problema de raíz: la desigualdad. No fue difícil poder ingresar en un partido donde quienes lo dirigen se sientan con vos a charlar cuando lo necesitás y, obviamente, si su agenda lo permite. Ser del PRO significa dejar la revancha como bandera política, ser del PRO significa entender que juntos y generando consensos se gobierna y se trabaja mejor, y esto se entiende de esta forma porque se cree y se valora que la gestión pública es para la gente que vive día a día y no para un relato que sólo repiten los obsesionados de la dialéctica política. Ser del PRO significa entender que el trabajo se logra mejor formando buenos equipos y no en liderazgos irracionales. Ser del PRO significa querer a la política, por lo que es, una herramienta de transformación social. Ser del PRO significa querer aprender y escuchar a los demás. Ser del PRO significa saber pedir disculpas cuando nos equivocamos y dar marcha para atrás si nos damos cuenta del error. Ser del PRO significa vivir con alegría la política, porque para nosotros es una vía de transmisión de felicidad para la sociedad. Ser del PRO es creer que la inversión en infraestructura es una de las bases para la verdadera transformación. Ser del PRO significa que apostamos en aquellos lugares donde nadie lo hizo, como en el sur de la Ciudad, lugar del que tantos hablan y pocos conocen. Polo Farmacéutico, el Metrobús, La Ciudad del Rock, el Parque del Centenario, la Villa Olímpica. Ser del PRO significa entregar las escrituras de las casas para liberar a la gente del clientelismo político, ser del PRO significa urbanizar los barrios más pobres la Ciudad, ser del PRO significa creer en la educación pública y elevarle su nivel a pesar de enfrentarse contra grandes gremios que no quieren el cambio. Ser del PRO significa crear una Policía Metropolitana desde cero, una alternativa frente a la inseguridad que se vive. Ser del PRO significa creer en la cultura, en la reapertura de sus teatros, en la promoción de espectáculos populares.
Ser del PRO significa querer trabajar para que más gente viva feliz y pueda disfrutar y estar orgullosa de vivir donde vive. Soy del PRO porque estoy comprometido para que la gente viva mejor y la política sea finalmente un verdadero servicio para la gente.