Por: Daniel Lipovetzky
Son muchos los amigos, conocidos y gente que se me acerca en la vía pública que todavía está dudando sobre qué hacer el próximo y crucial 25 de octubre. Y, por cierto, la gente quiere saber si lo que se promete se va hacer, si los candidatos son lo que se ve y especialmente por qué Mauricio Macri.
A veces les sugiero que observen más que lo que escuchan. “A las palabras se las lleva el viento”, dicen. Pero mirar es distinto, es difícil que lo que vemos no sea así. Surge sola, de ese modo, la respuesta a “¿Por qué Macri?”. Porque si querés cambiar, si creés que nos merecemos un país mejor, donde el dinero de tus impuestos vuelva a vos, donde se te respete como ciudadano en la plenitud de tus derechos, en el que la Justicia cumpla su rol sin depender de los designios del poder político, la mejor y única opción es Mauricio.
Macri tiene todas esas características a plena vista. Porque gobernó ocho años la Ciudad de Buenos Aires y con trabajo e inteligencia la transformó y la ingresó al siglo XXI. Porque la educación y la salud públicas porteñas abastecen con eficiencia a los porteños y también a la provincia de Buenos Aires. Porque sin depender de fondos adicionales de la nación, que siempre se le han negado, hizo las obras más importantes de la última centuria en el distrito que le tocó gobernar.
¿Si es cierto lo que promete Macri? Mire bien y compruébelo. ¿Es cierto lo que dicen los otros candidatos? Observe lo que hicieron hace muy poco, con quiénes trabajaron, quiénes pueblan sus listas.
Todos los personajes que nos han llevado a la actual situación, de marginalidad, de miseria, de delito organizado, de degradación institucional y violación de nuestros derechos, se reparten en otras listas. No importa lo que digan, importa lo que se ve, a todas luces evidente.
Pero Macri no solamente es la mejor opción porque los otros candidatos son la continuidad de hoy. Mauricio lo es porque representa el ingreso a la Argentina del futuro. Porque aporta soluciones novedosas y eficientes a los problemas que se le presentan, porque exhibe un equipo de trabajo de personas transparentes y trabajadoras, inteligentes, formadas, con una concepción de servicio público que ya habíamos olvidado que un funcionario pudiera tener.
De tal modo, amigo ciudadano, pregunte usted todo lo que quiera, porque hay respuesta. Pero si quiere una humilde sugerencia, observe, porque todo está a la vista. Los que lo llenan de palabras pueden no ser veraces. Los que lo abarrotan de números, proyecciones y cálculos muchas veces quieren convencerlo de una realidad que no es tal.
Cambiemos es una alianza que ha contenido en perfecta armonía a tres grandes partidos políticos con clara e inobjetable vocación republicana y democrática. Muchos pronosticaban dificultades de convivencia, pero tanto Macri, como Elisa Carrió y Ernesto Sanz se han articulado perfectamente, han puesto los intereses superiores del pueblo soberano por sobre los propios. Por eso Cambiemos se encamina a transformar la Argentina.
Sepa usted: esta es una elección fundacional, no constituye cualquier proceso electoral. Es una bisagra, un antes y un después, una oportunidad histórica, como hace mucho tiempo no se presentaba. Se juega una decisión crucial en paridad de condiciones, porque los que queremos cambiar y dejar un mejor país a nuestros hijos hace años que no contábamos con una opción con posibilidades ciertas de llevar adelante ese cambio. Ahora está a la mano, es nuestro si lo queremos. Y usted decidirá en qué país quiere vivir y qué caras quiere ver administrando los impuestos que paga de aquí en más. No solamente se decide si entregará su destino a Macri o al kirchnerismo nuevamente; también se define si usted confía en María Eugenia Vidal o en Aníbal Fernández. En definitiva, se traza en esta elección un perfil de sociedad, quiénes somos y qué queremos.
¿Por qué Macri? Porque ha demostrado con hechos, más que con palabras, que otro país es posible, que si lo queremos, el futuro está allí, al alcance de la mano. Porque no solamente es el más preparado, el que cuenta con mejor equipo, sino también porque es el único que garantiza el cambio. Usted puede verlo con meridiana claridad.