Por: Luis Gasulla
Hace 21 días, el periodista Jorge Lanata puso sobre el tapete la ruta del dinero, no declarado, que empresarios vinculados con el ex Presidente Néstor Kirchner, habrían sacado del país mediante diversas triangulaciones financieras. La creación de sociedades anónimas por doquier, prestanombres, extraños financistas que salen y entran de despachos oficiales como Pancho por su casa, y llamativos vuelos en pequeños aviones. El pasado 20 de abril, en mencionaba en mi nota “No voy en tren, voy en avión” a los hermanos Juliá, quienes le habían vendido al contratista Lázaro Báez el LearJet matrícula LV-ZSZ en 2007. En enero de 2010, Eduardo y Gustavo Juliá viajaron a Barcelona, España, con 944 kilos de cocaína creyendo ser impunes. Infobae investigó, según los registros oficiales de la Administración Nacional de Aviación Argentina (ANAC), que el LV-ZSZ realizó 2800 viajes a diferentes destinos, desde junio del 2007 en que Lázaro Báez pasó a ser su propietario. Fueron frecuentes los vuelos sin pasajeros de la nave rumbo a la República Oriental del Uruguay. Sólo en el último mes, desde el 13 de marzo al 14 de abril, el avión despejó 36 veces con sólo tres destinos: Río Gallegos, San Fernando, en la provincia de Buenos Aires, y Ushuaia. Desde la capital santacruceña, según el financista Federico Elaskar, salía el dinero rumbo a San Fernando para luego acercarlo a la casa del padre de Leo Fariña o a alguna cueva financiera en el centro porteño. El piloto de la aeronave, Ricardo Alfredo Aras, vive en la ciudad de Ushuaia, allí radica la explicación del tercer destino preferido del LV-ZSZ en el último mes.
El gobierno del Chaco también le vendió un avión al empresario en cuestión. El avión oficial de la provincia gobernada por Jorge Capitanich, sorprendentemente, fue utilizado por Leo Fariña al menos en tres oportunidades para viajar a Uruguay. Panamá fue un destino corriente del marido de la modelo Karina Jelinek como de Fabián Rossi. En ese avión también se subió uno de los gobernadores predilectos de la Presidenta para festejar el fin del agitado 2011 con sus hijas en el lujoso Hotel Trump Tower. Allí alquiló su habitación que cuesta, en promedio, 700 dólares la noche y disfrutó de las excelsas piscinas con una vista paradisíaca. Su ex mujer, Sandra Mendoza, lo denunció en la red social Facebook por no haberle pedido autorización para sacar a sus hijas del país. El hotel inspirado en el Burj Al Arab de Dubai quedaba, casualmente, en Panamá. Los detalles de la historia los relato en El negocio de los derechos humanos. Hugo Alconada Mon, en La Nación del domingo 28 de abril, descubrió que el Lear Jet utilizado por Capitanich para sus vacaciones privadas fue el que trasladó a Fariña al Uruguay, específicamente, a Punta del Este, el 22 de enero del 2011, poco después que regresara el gobernador de Panamá junto con sus dos hijas.
Inmediatamente de conocida la noticia en el Chaco, Capitanich salió a aclarar, en los medios locales, que “el gobierno del Chaco no tenía la operatoria del avión en enero del 2011”, cuando lo usó Fariña. El diputado radical Livio Gutiérrez indagó en sus archivos y halló que ese mismo avión salió el 25 de enero, tres días después de que lo usara Fariña, en un vuelo oficial a Río de Janeiro, Brasil. El 28 de enero de ese año, Leo Fariña volvió a subirse a la aeronave en cuestión. Extrañamente, la web oficial de la gobernación, el domingo al mediodía, había borrado la información acerca de los vuelos mencionados pero Gutiérrez ya había “capturado” la imagen.
Capitanich, Fariña, Baez y compañía han demostrado que la vieja frase de la época del Imperio Romano estaba equivocada. Parece ser que, todos los caminos conducen al Chaco y, también a Panamá.
Luis Gasulla presentará su libro El negocio de los derechos humanos en la Feria del Libro el próximo miércoles 1º de mayo, en La Rural, a las 17:30, en la sala Adolfo Bioy Casares.