Kicillof también se equivoca en los pronósticos

Carlos Arbia

Como ya se ha hecho una costumbre, el ministro de Economía Axel Kicillof volvió a criticar a los economistas y consultoras económicas por sus proyecciones, esta vez en el lanzamiento de Precios Cuidados V. En este caso, Kicillof fue más allá y manifestó que se trata de pronósticos asquerosos desinformados. “Recuerdo que en enero, cuando se lanzó esto, los analistas decían que se disparaba la inflación, se disparaba el dólar, hablaron cualquier disparate y sin embargo las empresas firmaron igual. La clave del éxito es el poder popular del plan”, expresó .

Lo que olvida el ministro en su relato de las diversas disparadas es que varias de ellas se cumplieron y sus proyecciones, de acuerdo a lo observado en el Presupuesto 2014, también fueron “horribles”. Citaremos tres variables como la inflación, el tipo de cambio oficial y el resultado fiscal. En enero del año pasado el dólar oficial se disparó, tal como anticipaba la mayoría de los analistas económicos, y terminó el año en $8,50 frente a los $6,21 que proyectaba el Presupuesto 2014; la inflación en lugar de ser el 9% anual que se proyectaba fue de aproximadamente un 24 % de acuerdo a los datos del INDEC y del 35% según las consultoras privadas, y el déficit fiscal llegará a unos 250.000 millones de pesos frente al superávit fiscal de 8500 millones de pesos que se calculaban en ese presupuesto.

Kicillof debería considerar que si un funcionario del Estado se equivoca en sus proyecciones o pronósticos es más grave que si lo hace un consultor privado. En el primer caso, el error lo paga la sociedad en su conjunto, mientras que en el segundo, si el consultor privado es responsable de un mal asesoramiento, la empresa que lo contrata decidiera seguir pagando o no su servicio.

En lo que respecta a la inflación para este año, todo indica que el Gobierno podría volver a fallar en sus proyecciones estimadas. En el Presupuesto 2015, la cifra del 14,5 % anual estimada por Kicillof para este año parece baja con respecto a la que calculan los “pronosticadores horribles”, al decir del ministro, que ven una inflación promedio del 25%. También parece muy optimista un dólar proyectado en 9,45 pesos para fin de año cuando la mayoría de los analistas lo ve en cerca de 10 pesos en la última etapa de un año electoral. En lo que respecta a los números fiscales, el Gobierno proyecta un déficit fiscal de $49.600 millones en el Presupuesto 2015 cuando este año terminará cerca de los 250,000 millones de pesos. Por lo tanto parece bastante difícil que el Gobierno reduzca el gasto o aumente tanto los ingresos para semejante reducción de déficit fiscal.

Kicillof afirmó que el éxito del programa Precios Cuidados es “una nueva refutación de los pronósticos asquerosos desinformados”. Pero debería reconocer también que los del Gobierno, elaborados por él y su equipo económico, fueron catastróficos a la hora de observar los resultados del 2014.