Por: Ruben Ullúa
En los últimos cuatro meses el índice Merval ha sufrido un importante ajuste, principalmente en términos de dólares: Perdió desde los máximos de mayo pasado cerca del 40 % y pasó de niveles máximos de 1057 dólares a mínimos intradiarios de 654 dólares (valores ajustados por contado con liquidación).
Aun reconociendo que la baja del índice ha sido importante, esta se considera sólo de carácter temporal y correctiva a todo el trayecto de avance desarrollado por este mercado desde noviembre del 2012, momento en que el índice alcanzaba un mínimo de 320 dólares.
Con la baja desarrollada en los últimos meses, el índice en dólares no sólo ha recortado entre el 50 % y el 61,8 % de Fibonacci a todo el tramo de avance previamente mencionado, sino que también con este recorte el Merval en dólares ha realizado el pullback a la zona de máximos históricos que había actuado como resistencia en su oportunidad y que ahora pasa a ser la principal contención y el soporte.
Por lo mencionado es que podemos decir que en la medida en que los precios logren mantenerse por encima de la zona de soporte en los 700-600 dólares alcanzados, en estas instancias un piso de importancia puede lograrse y los precios pueden retomar la senda alcista, no solo para recortar las pérdidas de los últimos cuatro meses, sino incluso para acceder a nuevos máximos históricos por encima de los 1057 dólares de abril-mayo pasado.
¿Dónde confirma el Merval una reanudación alcista directa en dólares?
La principal resistencia que tiene el índice en términos de dólares pasa actualmente por la zona de 850-900 dólares. Un movimiento de recuperación por encima de esa zona será necesario para corroborar nuestra lectura principal y considerar que los mínimos registrados han marcado un piso correctivo y que la tendencia de fondo para este mercado ha quedado habilitada. Inicialmente, para buscar el regreso hacia la zona de máximos de 1057 dólares y más tarde para acceder a objetivos primarios de 1450-1500 dólares de índice, hacia el próximo año, preferentemente.
¿Qué pasaría si el Merval retoma la baja y perfora los 700-600 dólares?
Básicamente si ello ocurre, debemos considerar que el proceso correctivo en fuerza desde mayo pasado se agudizará hacia una zona de soporte más deprimida de 500-450 dólares, donde la caída recortaría el 61,8 % del avance previo desde el año 2012 y que recién desde esas instancias el mercado estará en condiciones de retomar la senda alcista de fondo. Buscará recuperar la baja previa desde los máximos históricos de 1057 dólares y más tarde pretenderá escalar hacia los objetivos proyectados en torno a los 1450-1500 dólares para el próximo año.
¿Qué esperar para el índice Merval en términos de pesos?
Al analizar de mediano plazo el índice Merval en términos de pesos, nos encontramos con la particularidad de que las variaciones del tipo de cambio afectan la estructura de comportamiento y ello muchas veces puede sesgar nuestro análisis.
Desde el piso histórico del año 2008, los precios vienen desarrollando un movimiento de impulso mayor a la secuencia de fondo iniciada en los mínimos del año 2001.
En este contexto actual, el recorte en fuerza desde marzo-abril pasado sería sólo temporal y con soporte en la zona testeada de 8600-7300 puntos, para finalmente desde allí retomar alza de fondo y buscar hacia el próximo año 2016 nuevos máximos históricos por encima de los 12.600 puntos, quizás hacia instancias de 15.500-16.000 puntos de índice.
Se vienen las elecciones presidenciales
Ahora bien, no podemos pasar por alto que en pocas semanas habrá elecciones presidenciales y que el mercado jugará su propio partido, si es que ya no lo está jugando. Seguramente esta situación mantendrá al mercado con un alto nivel de volatilidad en los precios, la cual estará potenciada principalmente por el bajo nivel de volumen operativo.
Sin embargo, desde nuestra perspectiva analítica, en la medida en que el mercado respete los parámetros técnicos propuestos, entonces nuestro análisis y nuestra proyección se mantendrán intactos.
Si bien en términos de pesos la zona de soporte más importante que tiene el mercado son los 8600-7300 puntos, es válido aclarar que para nosotros será mucho más importante cuidar los parámetros técnicos sugeridos en términos de dólares y estos están dados por la zona de mínimo ya alcanzada de 700-600 dólares, o bien por el soporte más crítico en dólares propuesto, representado por la zona de 500-450 dólares.
Creemos que si el mercado ve posibilidades de que el próximo presidente argentino sea el elegido por este, entonces muy posiblemente los 700-600 dólares se mantendrán vigentes como nivel de contención y la salida alcista en los precios podría ser directa. Ahora, si, por el contrario, los 700-600 dólares fueran perforados, entonces muy posiblemente el mercado se encuentre anticipando que el ganador de las elecciones será quien menos quiere al mercado y, por lo tanto, el Merval podría agudizar su debilidad hasta los niveles críticos de 500-450 dólares, para allí intentar el piso correctivo a la baja desde marzo-mayo pasado y que recién desde esas instancias el avance de precio pueda quedar retomado de fondo.
El ciclo alcista de la bolsa argentina sigue apuntando al 2017
En varias oportunidades hemos mencionado que este movimiento alcista en curso de la bolsa argentina, en fuerza desde los mínimos del año 2012, aún tiene potencial de desarrollo, independientemente de las interrupciones temporales. En efecto, al analizar el comportamiento histórico del índice Merval en dólares, veremos que cada 60 meses, que es lo mismo que decir cada cinco años, el mercado argentino alcanza un punto de inflación importante. Lo interesante de este ciclo es que, salvo entre los años 1992-1997, donde ambos puntos de inflexión representaron un techo, desde 1997 el ciclo de 60 meses se ha venido intercalando entre alcista y bajista.
En efecto, a partir del techo conseguido en el año 1997, el mercado ingresa en un ciclo bajista de 60 meses, que se extiende justamente hasta el piso del año 2002: el peor momento de la crisis argentina. Posteriormente, desde el piso del año 2002, el ciclo de 60 meses nos lleva a los máximos del año 2007, que se reconoce como uno de los mejores años del kirchnerismo, debido a que Argentina había logrado acordar su deuda en default, había saldado su deuda con el Fondo Monetario Internacional y los indicadores económicos se encontraban en plena recuperación. Si tomamos este máximo del año 2007 y damos continuidad al ciclo de 60 meses, entonces llegamos a mediados del año 2012, un momento difícil para la bolsa, donde esta sufría los golpes del cepo cambiario. Ha sido a partir de esos mínimos del año 2012, desde donde el avance del índice ha quedado nuevamente retomado y, si damos continuidad a la ciclicidad que ha mostrado el mercado, entonces podemos deducir que este ciclo de avance de 60 meses aún presenta potencial y podría extenderse hasta mediados del año 2017. ¿Será así?